A inicios de abril, juventudes de todo el mundo se dieron cita en Benín, África, para el Diálogo Mundial de las Juventudes CIPD30, un evento organizado por UNFPA y enmarcado en el 30 aniversario de la Conferencia Internacional de Población y Desarrollo para escuchar las voces de una nueva generación sobre derechos sexuales y reproductivos a nivel global.
Alison Alvarado Porras, de 20 años y oriunda de Alajuelita, fue elegida para representar a Costa Rica. Acá nos cuenta su experiencia.
Mayo, 2024. Cuando a Alison le compartieron la convocatoria para participar en un encuentro en África, con personas jóvenes de todo el mundo, tuvo dudas sobre la posibilidad de ser elegida para representar en Costa Rica, pero su historial de activismo y liderazgo en pro de los derechos de las personas jóvenes, así como las voces de personas cercanas, la motivaron a aplicar. Días después, recibió una llamada de la oficina regional del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), confirmando su designación.
“No lo podía creer, primero fue un gran honor y de una vez pensar en cómo representar a Costa Rica de la mejor manera”, expresa esta enérgica joven, vecina de Alajuelita.
El Diálogo Mundial de la Juventud reunió a más de 400 personas adolescentes y jóvenes de todo el mundo, y es parte de una serie de eventos que conmemoran el 30 aniversario de la Conferencia Internacional de Población y Desarrollo (CIPD), realizada en El Cairo, Egipto en 1994. La CIPD puso en marcha un programa de acción mundial para situar los derechos de las personas en el centro del desarrollo sostenible, incluidos los derechos y derivado de la salud sexual y reproductiva.
Organizado por UNFPA junto al Gobierno de la República de Benín y los Gobiernos de Dinamarca y los Países Bajos, este encuentro se diseñó para celebrar a las juventudes como agentes de cambio, socias en el desarrollo, y garantizar que el Programa de Acción de Cairo sea relevante para las juventudes en las próximas décadas. Se llevó a cabo en un contexto global de transición demográfica, globalización, aumento de conflictos y crisis climática, y teniendo en cuenta que millones de personas jóvenes enfrentan obstáculos como la pobreza y la marginación, que limitan su acceso a la información y los servicios esenciales.
El evento también fue un espacio para determinar las prioridades impulsadas por las personas jóvenes que se llevarán a la Cumbre del Futuro de las Naciones Unidas, en septiembre de 2024.
Pasión entre ingeniería y derechos humanos
“Yo digo que tengo como una doble vida. Mi pasión es el área STEM (Ciencia, Tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés), pero también todo lo que son los derechos humanos”, dice Alison Alvarado Porras, estudiante de ingeniería industrial y quién desde hace muchos años trabaja en temas de liderazgo y participación juvenil.
Graduada en electrotécnica de un colegio vocacional, empezó a trabajar como técnica en instalación de generadores y actualmente es presupuestista en una empresa donde ella es la única mujer en un puesto técnico. “Desde el colegio me preguntaba por qué yo era la única mujer en esa área y fue cuando empecé a luchar por el activismo en la igualdad de género y en la defensa de derechos de las mujeres en áreas STEM”. Para ella es importante abrir esos espacios y que más mujeres puedan participar de esas áreas de ciencia y tecnología que son las que generan mayores posibilidades de empleo e ingresos.
Pero sus habilidades de liderazgo vienen desde su infancia. Siguió los pasos de su mamá y su papá, líderes del movimiento Guías y Scouts en Alajuelita, iniciando desde los 6 años hasta llegar al rango que hoy ocupa como Coordinadora de la Sección Mayor (personas entre los 18 y 21 años). “Nunca he tenido miedo de hablar en público, entonces siempre me pedían que diera palabras en todos los eventos”, cuenta. Así llegó al Consejo Participativo de la Niñez del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) y luego al Comité Cantonal de la Persona Joven de Alajuelita, en donde actualmente es la Presidenta.
Junto a un activo grupo de trabajo y con apoyo de la Municipalidad, han echado a andar proyectos que buscan mejorar los niveles de permanencia en el estudio y empleabilidad de personas jóvenes de su cantón, así como la inclusión de personas con discapacidad. “También hemos dado cursos para empleabilidad, idiomas, finanzas saludables, apoyo artístico y autoestima, así como información sobre cuidado de la sexualidad”, afirma.
Una experiencia para “abrir la mente”
Alison se tomó con mucho compromiso la oportunidad de representar a Costa Rica en un evento global, estudiando los índices nacionales y las problemáticas que afectan a diversas poblaciones, “porque yo hablo como Allison de Alajuelita, un cantón donde hay índices elevados de criminalidad o deserción del sistema educativo, pero Costa Rica es muy grande”, explica.
También se preparó estudiando las temáticas de la CIPD. Sin embargo, escuchar frente a frente testimonios de realidades que viven personas jóvenes en otras partes del mundo, le hicieron “abrir la mente”, como ella dice, y darse cuenta que el mundo tiene brechas enormes por las que hay que trabajar.
“En Afganistán, me comentaba la compañera, que ellas llevan dos años de no poder recibir ningún tipo de escolaridad. En Indonesia las comunidades LGBTIQ no se pueden mostrar ante el mundo. En Irak nos contaban que los Guías y Scouts forman parte de la guerra, no son como en Costa Rica, una asociación para la formación de la juventud, entonces me decían: ‘Ah eres guía y scout, ¿y vas a la guerra?’ O me decían: ‘Ah eres mujer, ¿puedes estudiar?’”
“Una amiga, también de un país de Latinoamérica, me comentaba que no tenía la posibilidad ni siquiera de comprar toallas femeninas. Entonces yo digo: ¿cómo un país o cómo una persona va a estar bien si no tiene ni la posibilidad de tener salud, de ser libre, de poder expresarse como quiere o incluso de comer, eso realmente le queda a uno en el corazón”, afirma.
Alison compartió que en nuestro país las juventudes no se enfrentan a este tipo de realidades, sin embargo, expuso que hay otros desafíos. “Dijimos: Sí, en Costa Rica dan los espacios para que las personas jóvenes nos reunamos, sin embargo no nos toman en cuenta la opinión”. También puso sobre la mesa temas como la necesidad de igualdad de género y la preocupación por los efectos del cambio climático. “Otros países decían: ‘nosotros también necesitamos que las mujeres estén en áreas STEM, también necesitamos que nuestras voces se tomen en cuenta, hacer un cambio por el clima”.
Esta activista dice que estar en un ambiente con líderes y lideresas de la juventud mundial le hizo sentir empoderamiento, pero también una sensación de que como personas jóvenes tienen opiniones y quieren dar soluciones.
“El mundo necesita mucha ayuda y es como que nosotros trabajamos en un pequeño charco de un gran río”, expresó.
Para Alison fue muy positivo conocer a UNFPA y el trabajo que hace esta agencia de salud sexual y reproductiva en el mundo. “Yo digo, qué bueno ver que una organización le da la oportunidad a personas con diferentes ideales pero bajo una misma línea. Por ejemplo, esa persona con VIH, tal vez le faltó un proceso de educación en salud sexual y reproductiva y UNFPA le da esa oportunidad. O una mujer que tuvo un embarazo en la adolescencia, UNFPA le da la oportunidad de que siga trabajando en su empoderamiento. Todo eso es lo enriquecedor. En el Diálogo muchos representantes estuvieron ahí gracias a UNFPA, representantes de grupos de VIH, feministas, en pro de la igualdad de género. Realmente conocer todo lo que ha trabajado UNFPA fue un gran honor”.
Las conclusiones del evento
Las y los participantes juveniles mostraron su determinación de impulsar un cambio positivo en sus comunidades y pidieron que se actúe urgentemente en los siguientes temas:
Mi cuerpo, mi vida: Salud Sexual y Reproductiva, Salud y Bienestar. Destacaron la necesidad de reforzar los servicios integrales de salud sexual y reproductiva adaptados a personas jóvenes. Hicieron un llamamiento a los Estados miembros para que descentralicen la cobertura sanitaria, inviertan en infraestructuras de salud reproductiva y eliminen barreras de acceso.
Transformar la Educación, Transformar Vidas: Ampliar las Oportunidades para los Jóvenes. Sistemas educativos que ofrezcan igualdad de oportunidades para todas y todos, y que capaciten a las pesronas jóvenes para prosperar en un mundo en rápida evolución.
Inclusión Radical: Proteger los Derechos Humanos y Promover la Igualdad de Género para las Juventudes en toda su Diversidad. Un llamado a frenar la influencia de los movimientos antiderechos y antigénero y subrayaron la importancia de incluir las voces de todas las juventudes, independientemente de su raza, etnia, sexo, edad, sexualidad, discapacidad o cualquier otro factor.
Adaptarse, Prosperar e Inspirar: Crear Futuros Resilientes en un Mundo en Crisis. Pidieron a los líderes mundiales establecer prioridades, asignar recursos e integrar iniciativas de justicia climática.
Alzar las Voces: El Poder de 1.900 Millones. Necesidad de una mayor representación y participación en los órganos de decisión mundiales, incluidos los parlamentos.
Alison destaca que, a nivel latinoamericano, este diálogo les permitió a los y las representantes de diferentes países de la región, acercarse y planear trabajo en conjunto para el futuro. “Decidimos que vamos a trabajar juntos en un plan, una hoja de ruta para focalizar nuestras ideas y propuestas como Latinoamérica, en temas como igualdad de género, cambio climático, salud sexual y reproductiva, salud física y mental”, expresó.
“Como siempre digo, debemos alzar la voz para poder ser escuchados y creo que de ahí en adelante el resto es seguir trabajando por esa voz, por esa voces, Ya no solo es mi voz, ya no solo es la voz de mi cantón, es la voz de mi país”, concluyó Alison.
Algunos datos de Juventudes en América Latina y el Caribe
- En la región de América Latina y el Caribe (ALC) habitan 160 millones de adolescentes y personas jóvenes (entre 10 y 24 años).
- Una de cada cuatro personas en la región es adolescente o joven.
- La Educación Integral de la Sexualidad (EIS) ha tenido retrocesos desde la época de la pandemia.
- ALC es la segunda región del mundo con más altas tasas de fecundidad adolescente después de África Subsahariana.
- La OMS estima que 11% de mujeres y adolescentes mayores de 15 años han sufrido violencia sexual.
- Las adolescentes entre 15 y 19 años son las que más sufren violencia de pareja en ALC.
- 14 de los 25 países con tasas más altas de feminicidios están en ALC.
- Esta es la única región del mundo donde los matrimonios infantiles no han disminuido en los últimos 25 años.
- La falta de EIS aumenta la exposición a la violencia sexual en niñas y adolescentes.
- Personas jóvenes con discapacidad tienen 3 veces más probabilidades de sufrir violencia física, sexual y emocional que las personas sin discapacidad.
- Mujeres jóvenes con discapacidad tienen 10 veces más riesgos de sufrir violencia sexual.
- Hay 26,7 millones de personas jóvenes afrodescendientes entre los 15 y 29 años.
- Hay mayores tasas de fecundidad adolescente en adolescentes afrodescendientes.
- Personas jóvenes indígenas (15-24) tienen más probabilidades de estar desempleadas que sus pares no indígenas (47,9 vs 35,7)
- Personas jóvenes indígenas viven mayores barreras en el acceso a servicios de SSR, además de no ser con perspectiva intercultural.
- Hay una violencia alarmante contra personas jóvenes indígenas: La violencia basada en género se combina con violencia por racismo y relaciones interétnicas discriminatorias, persecución y criminalización de defensoras/es de vida y territorio.
- 10.7% de personas migrantes internacionales en las Américas son jóvenes entre 15-24 años.
- Hay una brecha de información sobre niñez migrante no acompañada que impide determinar niveles de vulnerabilidad.
- Niñez migrante vulnerables a malos tratos, trata de personas y explotación.
Texto: Gabriela Rodríguez Hernández.
Fotos: Yonel Puga.