- Evento organizado por FLACSO, PNUD y UNFPA contó con la participación de personas jóvenes representantes de poblaciones con discapacidad, de la costa, indígenas, afrodescendientes, LGBTIQ+, de zonas rurales y urbanas.
- Empleo, salud y educación fueron los principales ejes de este conversatorio que se realizó en el marco de la II Cumbre de la Democracia
San José, 30 de marzo. El pasado martes se llevó a cabo el conversatorio: “La realidad que vivimos en persona y cambiamos en colectivo: Aportes desde las juventudes sobre retos y soluciones para la convivencia democrática”, en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Costa Rica y en el marco de la II Cumbre por la Democracia, cuyo lema fue: “Promoviendo el papel de la juventud en espacios políticos y democráticos”.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), y la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) Sede Costa Rica, con apoyo de la Universidad de Costa Rica, coordinaron un espacio para que personas jóvenes diversas dialogaran y plantearan sus reflexiones sobre retos y desafíos que enfrentan en el acceso a servicios de salud, educación integral, inclusiva y de calidad, mercados laborales, así como la prevención de la violencia en sus distintas formas y cultura democrática.
Las reflexiones tomaron como base insumos de investigaciones recientes generadas por el PNUD, FLACSO Costa Rica e IDESPO, en el marco del proyecto Construyendo una Ruta Común hacia el 2030, así como insumos recogidos por UNFPA en su trayectoria de trabajo con personas jóvenes. El evento se dividió en dos paneles, el primero de ellos giró en torno al tema de salud y educación y el segundo empleo y educación. En esta nota rescatamos algunas de las valiosas intervenciones:
Ana Francini González, de 21 años de Garabito, Puntarenas, comentó que en el tema de acceso a la salud, hay una deuda con el acceso a servicios, muchos estigmas y poca sensibilización hacia las necesidades de las personas jóvenes. “Si seguimos estandarizando la información (ante la diversidad de juventudes) no vamos a tener acciones afirmativas, no vamos a tener cambios. Debemos seguir apostando por espacios educativos, con una mirada sensible, interseccional, desde un enfoque de género, de derechos humanos, intercultural”, expresó.
“Nuestros pensamientos o propuestas no se escuchan o no son tomadas en cuenta como deberían para fortalecer el sistema democrático. La participación, en lugar de ser un derecho, en este momento es un privilegio”, dijo Mauricio Sandoval, investigador joven de FLACSO. Sobre el tema de acceso a la salud mencionó que la precarización o falta de empleo “no nos da acceso al seguro social, nos deja en una escena de desprotección”.
Por su parte Azalia Calderón, indígena Cabecar, de la reserva indígena Keköldi en Talamanca y Coordinadora de jóvenes RIBCA (del Caribe Sur), comentó que el reto para acceder a la salud es “todo”. Ella salió hace poco del colegio y desde entonces no ha podido asegurarse y para hacerlo le piden que pague. “La mayoría de los jóvenes no trabajamos. ¿Cómo quieren que paguemos algo si no tenemos con qué pagar? (...) Solo porque vivimos muy lejos, estamos como olvidados. Es un reto que vivimos cada día, una realidad que ustedes pueden ver si van a nuestra comunidad. Tenemos que buscar una solución porque siento que cada vez es peor”, expresó.
“Las juventudes son la población más afectada por el desempleo y la violencia, ambas expresiones de la falta de oportunidades para desarrollar sus proyectos de vida. En la región centroamericana colocan sus expectativas en un horizonte marcado por la migración. De ahí que tengamos que escuchar sus demandas y trabajar en políticas que anclen sus posibilidades de acceso al bienestar en nuestras sociedades, eso requiere de un esfuerzo colectivo con mirada de mediano y largo plazo. Las respuestas son urgentes si consideramos que la satisfacción con la democracia está relacionada con la capacidad de respuesta de la institucionalidad a sus necesidades más apremiantes en salud, educación, empleo digno, así como en la dotación de herramientas para emprender y, muy especialmente, dotado de instrumentos de salud mental y emocional, tal como lo han expresado repetidamente en este foro”, expresó Ilka Treminio, directora de FLACSO Sede Costa Rica.
Sistema educativo debe integrar herramientas para “salir al mundo”
En un segundo panel, sobre acceso a empleo y su relación con la educación, Henry Martínez, un joven antropólogo ciego y parasurfista, comentó que la educación debe enseñar a las personas ciudadanas la capacidad de convivir con la diversidad. “Hoy se habla de aulas inclusivas o universales sin que el personal tenga la preparación para manejar un grupo con tantas diversidades (…) Si bien la educación es fallida en este país, podemos forjar iniciativas desde nosotres para la educación que necesitamos. Para mí hay 3 palabras clave: integralidad, pertinencia y redes”, expresó Martínez.
“Los índices de desempleabilidad en las personas trans son altísimos”, comentó Guillermo Matute, hombre trans de la organización Síwo Alâr. “Es importante enseñar cosas que nos ayuden cuando salgamos del colegio, a los 18 salimos y no sabemos nada. Nadie le dice a uno que tiene que pagar impuestos, inscribir una marca, no tengo experiencia, pero me piden un montón de experiencia”, agregó.
En este punto coincidió Maraya Jiménez, estudiante de derecho, proveniente del Caribe Sur. “Son muy importantes los espacios donde los jóvenes puedan descubrir qué cosas les gusta, para ver qué es lo que el mundo tiene para ofrecer y dónde pueden ir. Que el sistema educativo comience a enseñar de verdad las herramientas necesarias para salir al mundo", agregó esta integrante del Centro Comunitario de Buceo Embajadores y Embajadores del Mar.
“La democracia se renueva continuamente con las voces y la fuerza de las juventudes. Este esfuerzo desarrollado por FLACSO, PNUD y UNFPA tiene como fin amplificar las voces y demandas de las personas jóvenes, así como plantear soluciones a los retos de la participación, la institucionalidad y la toma de decisiones desde una generación que vive tiempos de desigualdades y aceleración tecnológica. Esta es una oportunidad para que la Cumbre de la Democracia tenga un aire fresco desde las generaciones que no esperan el futuro, sino que están asumiendo ya el presente para transformarlo”, expresó Juan Luis Bermúdez Madriz, Jefe de Oficina de UNFPA Costa Rica.
"La democracia requiere de acuerdos normativos, de una arquitectura institucional, de poderes que hagan contrapeso entre ellos, en un delicado equilibrio, así como reglas sobre la temporalidad y alternancia del poder. Se trata de medidas para evitar demasiado poder, por demasiado tiempo en pocas personas. Es decir, preservar la libertad,” expresó José Vicente Troya, Representante Residente de PNUD en Costa Rica.
Puede ver la transmisión completa de este evento en: https://fb.watch/jBmz7n9Yh1/
Información de prensa:
- Gabriela Rodríguez Hernández, UNFPA Costa Rica, grodriguez@unfpa.org
- Pamela Barrientos, PNUD, pamela.barrientos.vargas@undp.org